Calculan que habrán venido entre 20 y 25.000 moteros de todo el país. Doy fe de que no es una cifra exagerada. Todavía hoy, domingo por la tarde, es incesante el ruido de los motores arriba y abajo por Sierra St. Los actos principales se han celebrado a un tiro de piedra de casa, en el downtown, junto a los casinos -que son los principales sponsors del evento-. Hoy el Reno Gazette Journal hacía una reflexión sobre la importancia de estos eventos para mantener la economía de la ciudad, toda vez que el modelo tradicional de los casinos está en descenso sostenido ahora que es posible apostar en cada vez más lugares de los Estados Unidos. Desde luego este mes de septiembre ha dado para mucho, entre globos, aviones, vacas y motoristas; quizá cuando llegue el invierno la cosa se calme un poco...
Como ocurre en este tipo de actos, no han faltado las exhibiciones de máquinas en la calle. Trompos, carreras, excursiones por los alrededores... Aunque no sé qué era más interesante de ver, si la exhibición de gadgets añadidos a las motos, o el paisanaje que se acercaba a verlas, tanto los dueños como gente "normal". Aunque qué voy a decir, viendo el modo en que se visten por aquí, creo que yo era el que más desentonaba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario